La masonería, una sociedad secreta con antiguos orígenes, ha sido predominantemente masculina durante siglos. Sin embargo, hubo una mujer pionera que desafió esta norma. **James Anderson**, un teólogo y masón escocés, estableció en los "Reglamentos Generales de 1723" que las logias masónicas eran exclusivamente para hombres.

Sin embargo, a mediados del siglo XIX, la masonería comenzó a abrir sus puertas a las mujeres. La primera mujer masona reconocida oficialmente fue **Elizabeth Aldworth**, una irlandesa que logró entrar en una logia masónica en Cork, Irlanda en 1712.

Elizabeth Aldworth fue admitida en la logia porque su hermano era masón, y según la leyenda, cuando los miembros se negaron a abrirle la puerta, ella se atrevió a asomarse por un respiradero y escuchar la ceremonia desde afuera. Impresionados por su valentía, los miembros de la logia decidieron admitirla.

Aunque Elizabeth Aldworth fue una excepción en su época, su ingreso a la masonería allanó el camino para que más mujeres se unieran a esta sociedad secreta. En el siglo XX, muchas mujeres masonas notables como **Annie Besant** y **Colette Yver** jugaron roles importantes en la masonería.

¿Quién fue el creador de los masones?

La historia de los masones es fascinante y llena de misterios. A lo largo de los años, muchas teorías han surgido sobre quién fue su creador. Algunos creen que fue el rey Salomón, mencionado en la Biblia, ya que se le atribuye la construcción del Templo de Jerusalén y se le considera un gran arquitecto. Otros atribuyen la creación de la masonería a los antiguos constructores de catedrales góticas, quienes habrían creado una organización secreta para transmitir sus conocimientos y técnicas de construcción.

Sin embargo, la versión más aceptada es que los masones modernos fueron fundados en 1717 en Londres, cuando se unieron cuatro logias distintas para constituir la Gran Logia de Inglaterra. A partir de ese momento, la masonería comenzó a expandirse por todo el mundo, adoptando principios de libertad, fraternidad e igualdad.

No obstante, es importante mencionar que, aunque se le atribuye la fundación de la masonería moderna a la Gran Logia de Inglaterra, su origen se remonta a organizaciones de constructores medievales. La masonería ha evolucionado a lo largo de los siglos, adaptándose a los cambios sociales y políticos, y continúa siendo una sociedad discreta y reservada.

¿Cuándo y dónde nace la masonería?

La masonería es una organización que se remonta a varios siglos atrás. Se le atribuye un origen incierto, aunque se cree que nace en la Edad Media en Europa. Sus primeros vestigios se encuentran en las corporaciones de constructores de catedrales, donde los albañiles llevaban a cabo rituales y prácticas secretas.

En el siglo XVII, la masonería comienza a organizarse de forma más formal en Inglaterra. Se establecen las primeras logias y se crean los primeros rituales y símbolos que caracterizan a la orden. Durante este periodo, la masonería se convierte en una sociedad de hombres que promueve valores como la fraternidad, la tolerancia y el conocimiento.

Con el paso del tiempo, la masonería se expande a otros países europeos y posteriormente a América. En el siglo XVIII, se fundan las primeras logias masónicas en Estados Unidos y México, países que juegan un papel importante en la difusión de la orden en el continente americano.

Hoy en día, la masonería está presente en muchos países alrededor del mundo. Sus miembros provienen de diferentes estratos sociales y profesiones, y comparten un interés en el simbolismo, la filosofía y la búsqueda del conocimiento. La masonería se ha adaptado a los cambios sociales y continúa siendo una organización que promueve valores universales y el desarrollo personal.

¿Cuántos masones hay en España?

La Gran Logia de España, que es una de las principales organizaciones masónicas en el país, estima que hay alrededor de 4.000 masones en España. Esta cifra incluye tanto a hombres como a mujeres que forman parte de las distintas logias masónicas que existen en todo el territorio español. Cabe destacar que también existen otras organizaciones masónicas en España que no están afiliadas a la Gran Logia de España, por lo que el número total de masones en el país podría ser mayor.

La masonería es una fraternidad filosófica que busca promover valores como la libertad, la igualdad y la fraternidad. Los masones se reúnen en logias, donde realizan rituales, estudian filosofía y debaten sobre diferentes temas. Cada logia tiene su propio número de miembros, por lo que la cantidad de masones en España puede variar dependiendo de la logia a la que pertenezcan.

En España, la masonería ha tenido varios momentos de auge y decadencia a lo largo de su historia. Durante el siglo XIX, la masonería gozó de cierto reconocimiento y tuvo una influencia en la política y la sociedad española. Sin embargo, durante la dictadura de Francisco Franco, la masonería fue perseguida y muchos masones fueron encarcelados o ejecutados. A partir de la transición democrática, la masonería ha ido recuperando su presencia y actualmente está reconocida como una entidad legal en España.

La masonería en España ha sido objeto de numerosos mitos y teorías de conspiración a lo largo de la historia. Algunas personas consideran a la masonería como una sociedad secreta y atribuyen a los masones un poder e influencia desproporcionados. Sin embargo, la realidad es que la masonería es una organización discreta y reservada en cuanto a sus rituales y prácticas internas, pero no es una sociedad secreta. Los masones no buscan el poder político o económico, sino que se centran en su desarrollo personal y en contribuir al bienestar de la sociedad.

¿Qué es ser un masón?

Ser un masón es formar parte de una organización que tiene como base principal el aprendizaje y la búsqueda constante de la verdad. Los masónes se caracterizan por ser personas que se comprometen a trabajar en su propio crecimiento personal, así como en el beneficio de la humanidad.

Un masón es alguien que se esfuerza por vivir de acuerdo con los principios de la fraternidad, la justicia y la tolerancia. Esta organización promueve la importancia de respetar y valorar a cada individuo, sin importar su origen étnico, religión o posición social.

La filosofía masónica se basa en un sistema de símbolos y rituales que buscan estimular el desarrollo de la mente, el espíritu y el corazón de sus miembros. A través de estos símbolos, se invita a cada masón a reflexionar sobre su propia existencia y a buscar un mayor entendimiento de sí mismo y del mundo que lo rodea.

La logia masónica es el lugar donde los masónes se reúnen para llevar a cabo sus trabajos y realizar rituales. En estas reuniones, se fomenta el compañerismo y el intercambio de conocimientos entre los miembros. Las logias masónicas son consideradas como espacios sagrados, donde se crea un ambiente propicio para el crecimiento espiritual y la reflexión.

En resumen, ser un masón implica formar parte de una hermandad comprometida con el desarrollo personal y el bienestar de la humanidad. Es una oportunidad para aprender y crecer a través de la reflexión y el estudio de los símbolos masónicos. Además, ser parte de una logia masónica brinda un espacio de convivencia y fraternidad con otros miembros de la orden.