Los astures fueron un antiguo pueblo que habitó la región de Asturias, en el noroeste de la península ibérica. Durante la época de la conquista romana, los astures fueron considerados como uno de los grupos indígenas más valientes y resistentes de la zona.

Los astures eran conocidos por su feroz resistencia contra las legiones romanas y su habilidad en la guerra. Su territorio montañoso les brindaba ventajas estratégicas y les permitía organizar rápidos ataques sorpresa. Su fama como guerreros hábiles y temibles se extendió por toda la península ibérica.

La sociedad astur estaba formada por diferentes tribus que se unían en momentos de amenaza exterior. Tenían una estructura social jerarquizada, con un líder conocido como "príncipe" y una aristocracia guerrera. Además de su destreza militar, los astures también eran hábiles agricultores y ganaderos.

La cultura astur se caracterizaba por su religión animista, en la que se veneraban a los dioses de la naturaleza, como el sol, la luna y los ríos. También practicaban rituales de sacrificio y celebraban festividades para agradecer las buenas cosechas.

En el año 19 a.C., el emperador romano Augusto inició una campaña militar para someter a los astures. A pesar de su resistencia, los romanos lograron conquistar la región y fundaron la ciudad de Asturica Augusta (actual Astorga) como centro administrativo. A partir de entonces, los astures se integraron gradualmente en la sociedad romana.

Aunque los astures perdieron su autonomía política, su legado cultural y su espíritu de lucha se han mantenido a lo largo de los siglos. Actualmente, en Asturias se conservan vestigios arqueológicos de su presencia, como castros, necrópolis y otros monumentos que reflejan su antigua forma de vida.

¿Cómo llamaban los romanos a los astures?

Los romanos llamaban a los astures con el nombre de "asturianos". Los astures eran un pueblo celta que habitaba en lo que hoy conocemos como el norte de España, en la región de Asturias.

La relación entre los romanos y los astures no fue siempre pacífica, ya que los astures fueron uno de los pueblos que más resistencia opusieron a la conquista romana. Aunque los romanos lograron someter a los astures en el siglo I a.C., estos nunca aceptaron del todo la dominación romana.

Los astures eran conocidos por su valor y resistencia frente a los romanos, quienes consideraban a los astures como un pueblo guerrero y orgulloso. Los astures vivían principalmente de la agricultura y la ganadería, aprovechando los recursos naturales de su territorio montañoso.

A pesar de la dominación romana, los astures mantuvieron su identidad cultural y su lengua hasta la llegada de los visigodos en el siglo V. La historia de los astures es parte fundamental de la historia de España y su legado perdura hasta el día de hoy en la región de Asturias.

¿Qué comían los astures?

Los astures, antiguos pueblos celtas que habitaban en el norte de la península ibérica, tenían una alimentación basada principalmente en alimentos provenientes de la ganadería, la agricultura y la recolección.

El principal alimento de los astures era la carne. Criaban ganado, como vacas, ovejas y cerdos, y se alimentaban de su carne, tanto fresca como curada. La carne de cerdo era especialmente apreciada, y se utilizaba para la elaboración de embutidos como el chorizo y la morcilla.

Otro alimento importante en la dieta astur eran los lácteos. Los astures domesticaban vacas para obtener leche, con la cual elaboraban quesos y productos lácteos como la manteca. Estos productos eran fundamentales en su alimentación.

En cuanto a la agricultura, los astures cultivaban diversos cultivos, principalmente cereales como trigo, cebada y centeno. Estos cereales se utilizaban para la elaboración de pan y otros productos derivados, como la cerveza de cebada.

También recolectaban frutas y verduras, como manzanas, peras, uvas, cebollas, ajos y legumbres. Estos alimentos complementaban su dieta y aportaban nutrientes importantes.

Además de estos alimentos básicos, los astures también consumían miel, extraída de colmenas de abejas, y pescados de ríos y del mar Cantábrico.

En resumen, la dieta de los astures se basaba en la carne, los lácteos, los cereales, las frutas y las verduras, y se complementaba con la miel y los pescados. Estos alimentos les proporcionaban los nutrientes necesarios para sobrevivir en su dura vida en la montaña.

¿Qué idioma hablaban los pueblos astures?

El idioma que hablaban los pueblos astures, antiguos habitantes de Asturias en la época prerromana, es difícil de determinar con precisión debido a la falta de registros escritos. Sin embargo, se cree que los astures hablaban un idioma perteneciente a la rama celta del grupo de lenguas indoeuropeas.

Los astures eran uno de los pueblos prerromanos más antiguos de la Península Ibérica y su territorio se extendía por gran parte de la actual Asturias y algunas zonas de León y Cantabria. Su cultura y manera de vida estaban fuertemente influenciadas por su entorno montañoso y su cercanía al mar Cantábrico.

Aunque no existen textos escritos en el idioma astur, se han encontrado algunos topónimos y antropónimos que nos dan pistas sobre sus palabras y pronunciación. Además, la relación lingüística entre los astures y otros pueblos celtas de la Península Ibérica también nos ayuda a inferir algunas características del idioma.

Se estima que el idioma astur tenía similitudes con otras lenguas celtas, como el galaico o el lusitano, pero también presentaba particularidades propias. Desafortunadamente, la falta de registros escritos hace difícil reconstruir completamente el idioma y comprender su vocabulario y gramática de forma precisa.

Con la llegada de los romanos a la Península Ibérica en el siglo I a.C., la cultura y lengua de los astures comenzaron a ser influenciadas por el latín, que se convertiría en la lengua dominante en la región durante varios siglos. Esto llevó a la desaparición gradual del idioma astur y su sustitución por el romance astur-leonés, precursor del asturiano actual.

Aunque hoy en día no se habla el idioma astur, la cultura y la historia de los pueblos astures son elementos importantes en la identidad de Asturias y se han realizado esfuerzos por preservar y promover la lengua y las tradiciones asturianas.

¿Cuando llegaron los astures a España?

Los astures llegaron a España en la Edad del Hierro, aproximadamente en el siglo VIII a.C. Se establecieron en el territorio que hoy en día se conoce como Asturias, en el norte de la península ibérica.

Los astures eran un pueblo celta que se dedicaba principalmente a la ganadería y la agricultura. Vivían en pequeñas aldeas fortificadas y se organizaban en tribus independientes. Su cultura estaba influenciada por los celtas, pero también tenían rasgos propios.

La llegada de los astures a España generó conflictos con otros pueblos que ya habitaban la región, como los cántabros. Estas disputas territoriales se prolongaron durante siglos y fueron motivo de numerosas guerras y enfrentamientos.

Los astures eran conocidos por su resistencia y valentía en la batalla. Fueron capaces de resistir los intentos de conquista de distintos pueblos y posteriormente del Imperio Romano. Su indomabilidad y capacidad de adaptación al entorno montañoso de Asturias les permitió mantener su independencia durante mucho tiempo.

Los astures dejaron una importante huella en la historia de España. Su legado se puede apreciar en la toponimia, la arquitectura y las tradiciones de Asturias. Además, su resistencia ante la conquista romana es un ejemplo de coraje y determinación que ha sido enaltecido a lo largo de los siglos.

Al hablar de la llegada de los astures a España, es imposible no mencionar también los yacimientos arqueológicos que han sido descubiertos en Asturias. Estos testimonios del pasado nos permiten conocer más sobre la vida y la cultura de este antiguo pueblo celta.